No recibo tus campanas...

No recibo tus campanas

 

Rosas te envié en poemas:

rosadas, rojas y blancas,

para perfumar mis penas,

dedicarte mis palabras

alguna de ellas, ansiosas,

otras, repletas de lágrimas,

- respuestas maravillosas -

que bajaban de tu alma.

Que te pasa en estos días?

que sucede en mi esperanza?

será porque estoy enfermo?

o quizás que muy menguada

veo mi voz este invierno?

y quisiera en alabanzas

recitarte ya mis versos

bajo tu tibia mirada?

No se, pero si se que te amo,

más allá de las distancias,

más allá de la agonía

de no besar tus mañanas...

de quedar sólo en las tardes,

de oprimirse mi garganta

ante el ya claro mutismo,

que emana hoy de tu alma.

O será el hilo de plata

que no envía tus campanas...?

 

 

“...Siento que estoy muy ausente

profundamente alterada.

No temas poeta amado

que emergeré de las aguas...”

 

 

Emergerás de las aguas

tu piel de nácar mojada

desnuda de cuerpo y alma...!

Ay...! mis perdidas palabras,

ay...! mi soledad amarga,

ay...! mis tibias esperanzas

de mil noches en tu cama...

mil besos de madrugada,

para beberme tus aguas,

- elixir del cuerpo y alma -

esperanzas renovadas...

Muñeca rubia adorada,

se me oprime la garganta,

si no oigo tus palabras,

o no me entibio en la fragua

de tus ardientes miradas,

y de besos en tu espalda

o en palomas asombradas

- elixir del cuerpo y alma -

Tu aroma tiene fragancias

de uvas y de manzanas,

de naranjas valencianas

y de mujer bien templada...

Si...! emerge ya de las aguas,

que te envuelvo con mis ansias

y te acaricio tus lágrimas...

 

 

Federico L.M. de Luque

Derechos Reservados

 

 

Esta tarde de miedo

Esta tarde de miedo

Toda vida es el encuentro
y no lo hay sin presencia...

Nuestras almas en silencio:
tal como definir la ausencia,
el no verte... el te espero
o esa casi indiferencia
de no oír ya tus "te quiero"
desde el fondo de tu esencia
con la voz de otros tiempos,
espontánea, sin esquemas,
acurrucada en mi pecho,
con mis caricias inquietas
y recitándote versos
de amores, transferencias
y enloquecidos besos...
amando tu primavera,
desde mi triste invierno
y con tu lluvia de estrellas...

Hoy, te extrañé en secreto,
tanto, que sentí miedo...!

Federico L.M. de Luque
Derechos Reservados – 2013

A Mariel

No quedan estrellas,
tu padre se apaga,
la luna no brilla
y fluyen las lágrimas...
de tus ojos bellos,
ruedan en tu cara
todo es agonía,
su vida se escapa
Dios, en estos días
te deja sin anclas...!
Llora niña mía
- mi llanto acompaña -
es ley de la vida
que a tu padre llama,
y estás conmovida
con Cecil, tu hermana,
llorando a escondidas,
estrujan sus almas
tristes, sorprendidas,
contraídas, pálidas
y como dos niñas
ya sin esperanzas...
La melancolía
a ambas atrapa,
como una llovizna
de textura trágica...
Esta, mi poesía
te dice en palabras:
muchacha querida,
yo vengo a abrazarlas,
vuestro amor de hijas
que les duele el alma,
son como caricias
que a tu padre alcanza
donde él transita
como circunstancia,
su meta divina
es tu madre amada...!

Entonces Mariel, sonrían,
no se sientan destrozadas,
lloren, quizás tal llovizna,
la bendición de Dios acompaña.

Federico L.M. de Luque

Derechos Reservados

Mayo 10 de 2013

Sin Límites

Sin Límites

 

 

Es muy cierto que sin límites te amo,

que mi pecho alberga un corazón oceánico,

por los años que funciona sin descanso,

por el tiempo que te llevaba esperando...

que no ha de ser por su real tamaño

pues cabe en el hueco de tu mano,

en el fondo de tus ojos encantados,

que al placer del amor lo han destinado...

 

Todo eso es muy cierto y sin embargo

la razón por la que sigo enamorado,

es tu dulzura, tu mirada, tu encanto,

tu cabello, tu frente y tus labios...

la elegía deliciosa de tu canto

al responderle su propio canto

puntual, como la sangre en tu costado,

y la tierna caricia de tus manos...

 

Es que mi corazón vive ensimismado,

deletreando tu nombre adorado,

con ritmo tal vez algo pausado,

percibiendo el amor que tu le has dado...

soñando cada noche con tu abrazo

romántico, permanente, apasionado,

casi sin pausa... casi sin llanto,

estremecido... esperanzado...!

 

 

Federico L.M. de Luque

 

Derechos Reservados - 2013

 

Por qué...?

Por qué ?

Por qué ahora el pasado se presenta ante mi?
tal vez hasta en las voces que no puedo distinguir,
... Por qué siento a mis abuelos, como si los tuviese aquí?
a mis padres, cuyos abrazos aún puedo sentir
y hasta el cálido recuerdo de Violeta Valery,
porque canta, cada noche, exquisita, para mi...!


Por qué mis veinte años?, por qué los tengo aquí?
clavados en mis ojos y no me dejan dormir,
como fue la travesía de aquel buque en que partí
hacia el centro de los mares, con lentitud sin fin?,
aquel cielo y sus estrellas, aquel beso en el cenit
y aquella foto de abordo, que no se porque perdí...!


Por qué ahora el pasado se presenta ante mi?
tal vez algo no cerrado, que no quiere prescribir?
algún ensueño frustrado que no deja de sufrir?
o muy mal interpretados por los actores del film
es la vida que, por siempre, hace el balance del fin?
- Entretanto el corazón, que fibrila en su latir...! -

Federico L.M. de Luque

Derechos Reservados - 2013